En este Blog podran ver varios de mis cuentos que posteo permanentemente en los Talleres De Escritura de Psicofxp y Foro Metrópolis. Espero que los disfruten tanto como yo. See Ya!!!

14 diciembre 2005

05 - El Astronauta


Patrick se acercó a la ventana del cohete, y suspiró. Se sentía decepcionado. Recordó cuando era chico, y corria por el patio de su casa en las oscuras noches de verano, atrapando luciérnagas. Recordó la voz de su madre:

-Patrick, ¡a dormir!

-¡Ya voy, mamá!

Se vió a si mismo corriendo, con una luciérnaga entre sus manos.

-Es para ti, mamá.

-¡Muchas gracias!

-Cuando sea grande, seré astronauta, y al regresar de mis viajes, te traeré estrellas de regalo.

Ella sonreía y lo acompañaba hasta su cuarto, hablando de cometas y galaxias. Después él se dormía, soñando con los anillos de Saturno. Recordaba toda esa felicidad, y no podía comprender porqué ahora sentía tanta tristeza. Ya era astronauta, pero no era feliz. Se sentía asfixiado dentro del cohete, y las cosas del espacio que había visto mil veces en revistas, televisión y en sus propios sueños, las cosas que había esperado tanto para verlas de cerca, ahora carecían de magia para el, y las veía vacías. Quería volver, estar con Maggie, besarla a ella y a su hermosa panza de seis meses. Quería abrazar a su madre y decirle que se había equivocado, que no quería ser astronauta, que los meteoritos son solo rocas viajando a la deriva; los agujeros negros son como ojos abismales de monstruos devoradores de luz; que el sol es un corazón sangrante de fuego que lo quema por dentro, y que La Tierra es solo una esfera silenciosa que lo entristece con su melancolía azul.
Sentía miedo todo el tiempo. Creía que jamás volvería, que estaría a la deriva por el espacio, condenado a vivir en eterna soledad.

-Este no es mi lugar – murmuró para si mismo.

Cerró los ojos con fuerza, tratando de no pensar, justo en el momento en que su computadora le avisaba que había recibido un mensaje. Vió que era de Maggie y de su madre.

Patrick: te escribo para contarte que hice cálculos y tu retorno es poco antes de la fecha del nacimiento, asi que no tienes que preocuparte. En la televisión y los periódicos hablan mucho de ti. Estoy muy orgullosa. Espero ansiosa tu llegada. Te amo. Maggie.

Patrick sonrió emocionado. Leyó el de su madre.

Querido hijo: espero que estés muy feliz en el espacio, cumpliendo tu sueño, y que todo sea tan hermoso como lo deseaste. No olvides tu promesa de las estrellas. Te quiere mucho, Mamá.

Patrick se largó a llorar como un chico. Su madre aún recordaba todo, y su esposa estaba orgullosa de el.Se levantó y observó a La Tierra. Se veía hermosa. La lejanía ya no le dolía. Era parte de su trabajo.

-Soy un astronauta – dijo – Soy lo que siempre soñé.

Se puso el traje y salió fuera del cohete. Las estrellas parecían diamantes esparcidos sobre terciopelo oscuro.

-Como luciérnagas en las noches de verano – pensó, y se quedó sonriendo, en silencio, fascinado por la inmensidad del espacio.

1 Comments:

Blogger luciérnaga said...

Vaya, me dejas boquiabierta te digo que es de locos algún día te mostraré mi cuento "Luciérnaga" que se ha vuelto mi alter ego un saludo y un beso grande.

26/11/06 10:54 p. m.

 

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